La medida también abarca el cierre de diez sucursales más en todo el país
Siguen las malas noticias para los jubilados. A la amarga novedad de que también comenzarán a pagar impuesto a las ganancias los beneficiarios que cobren una pensión y una jubilación que en total sumen más de $55.804 pesos, se supo que el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados, más conocido como Pami, decidió cerrar una serie de oficinas de atención al público en distintos puntos del país.
Según la resolución 2019-225, publicada por Pami el viernes 1° de febrero, se dispuso el cierre de 10 dependencias de la obra social ubicadas en Piñeyro, Quequén, Juan Manuel de Rosas y Santa Lucía, en la Provincia de Buenos Aires; Plaza Huincul, en Neuquén; Puerto General San Martín, en Santa Fe; Dolavon, en Chubut; La Puerta, en Catamarca; Nonogasta, en La Rioja; y San Agustín, en Entre Ríos.
Al respecto, ante estas medidas arbitrarias, Valentín Mastrángelo, Secretario General del Sindicato de Trabajadores de Pami, advirtió: “Primero quitaron medicamentos, ahora se cierran agencias”. Según las autoridades del organismo, la normativa, que dispone los cierres de centros y bocas de atención, “busca alcanzar la eficacia y eficiencia de accesibilidad a las prestaciones”.
Fuente El Ciudadano