A Gonzalo Paz, Gustavo Spoleti y Jorge Quintana le atribuyeron realizar tareas ilegales con el objetivo de favorecer la situación procesal del ex titular de la Agrupación Cuerpos de la UR XVII, acusado de pegarle un tiro en la nuca a Juan Cruz Vitali en Capitán Bermúdez.
Tres oficiales superiores de la policía de San Lorenzo fueron acusados este jueves de diseñar y concretar una maniobra de manipulación de pruebas para que el caso de un comisario acusado de asesinar de un balazo a un conductor, ocurrido tras un control de tránsito en Capitán Bermúdez hace dos años, se tramitara judicialmente como un accidente mientras empuñaba su arma. Esa alteración fue lo que le permitió a este comisario lograr una atenuación de prisión y la libertad después al dictaminarse, debido al éxito de este armado, que la muerte era resultado de un acto sin intención.
Al desplegar la evidencia, los fiscales Luis Schiappa Pietra y Matías Edery afirmaron que estos oficiales de alta jerarquía montaron una estrategia que incluyó trabajar para los defensores particulares del policía implicado, mantener reuniones regulares con esos abogados con un objetivo común, elaborar una pericia oficial que propiciara la idea de un accidente, hacer gestiones para que se cambie la vaina de la bala que mató al conductor e intervenir en el sumario policial a espaldas de la fiscal actuante, todo con el fin de desincriminar al comisario involucrado.
Los policías acusados de orquestar este complot son el ex jefe de la Unidad Regional de San Lorenzo, Gonzalo "Chino" Paz; el ex jefe de Plana de esa departamental, Gustavo Spoleti, y el jefe del Departamento Criminalístico de la PDI Jorge Quintana. Al desplegar la evidencia, los fiscales Luis Schiappa Pietra y Matías Edery afirmaron que estos oficiales de alta jerarquía montaron una estrategia que incluyó trabajar para los defensores particulares del policía implicado, mantener reuniones regulares con esos abogados con un objetivo común, elaborar una pericia oficial que propiciara la idea de un accidente, hacer gestiones para que se cambie la vaina de la bala que mató al conductor e intervenir en el sumario policial a espaldas de la fiscal actuante, todo con el fin de desincriminar al comisario involucrado.
Toda esta acción de encubrimiento se registró en la pesquisa del homicidio de Juan Cruz Vitali, ocurrido el 12 de mayo de 2019 en Capitán Bermúdez. Aquel día ese muchacho, de 23 años, evadió un control de alcoholemia en esa localidad. Eso desencadenó una persecución policial que terminó dentro de la casa del tío del conductor al que seguían. Allí el comisario Sergio Di Franco efectuó un disparo con su arma reglamentaria que impactó en la cabeza de Vitali lo que le ocasionó la muerte.
Al cabo de una audiencia virtual que se extendió por espacio de tres horas, la jueza María Trinidad Chiabrera aceptó las imputaciones contra los ex jefes policiales Gonzalo “Chino” Paz, Gustavo Spoleti y Jorge Quintana. En su resolución dictó una medida no privativa de la libertad para el trío de uniformados. Cuando se levanten las restricciones por la pandemia, deberán firmar cada semana en la Oficina de Gestión Judicial. En los casos de Paz y Spoleti deberán abonar una fianza de 300 mil pesos. En tanto que Quintana, ex jefe de la división Criminalística de la PDI, tendrá que depositar una caución de 200 mil pesos.
En la evidencia presentada por los fiscales de la Agencia de Criminalidad Organizada aparecieron los nombres del senador Armando Traferri y del ex fiscal Gustavo Ponce Asahad. A través de las pruebas recolectadas, los fiscales Luis Schiappa Pietra y Matías Edery le atribuyeron haber mantenido conversaciones con Gustavo Spoleti, uno de los tres uniformados investigados por ocuparse de tareas ilegales para alivianar la situación procesal de Sergio Di Franco, el ex jefe de la Agrupación Cuerpos de la Unidad Regional XVII acusado de dispararle en la cabeza a Vitali.