Más de 3 mil personas celebraron el Día de las Infancias en el Camping Aceitero

Más de 3.000 personas colmaron el Camping Aceitero de Timbúes, disfrutando de una jornada inolvidable pensada para toda la familia trabajadora.

El predio se preparó con esmero para recibir a los más chicos, quienes desde el mediodía comenzaron a recorrer las más de 30 estaciones de juegos distribuidas en todo el camping: inflables gigantes, juegos Arcade, propuestas de realidad virtual, actividades deportivas y de destreza física fueron parte central de la propuesta recreativa.

Apenas ingresaban, los niños y niñas recibían vasos personalizados y un cálido recibimiento por parte de artistas circenses y robots gigantes, que marcaron el inicio de un día mágico.
El cuerpo de delegados del SOEA desplegó una gran tarea logística, trabajando intensamente en la preparación y entrega de más de 4.500 panchos y bebidas para todos los presentes. Ya por la tarde, se completó la merienda con un alfajor y un jugo individual para cada niño.

Durante su discurso de bienvenida, el Secretario General del SOEA, Daniel Succi, agradeció el trabajo colectivo y subrayó el esfuerzo realizado para que la jornada fuera posible.

“Desde el martes los compañeros vienen trabajando para poner el predio en condiciones tras las lluvias. Esto no se hace por un solo hombre. Hay un equipo de trabajadores en la Comisión y en el Cuerpo de Delegados que se dedica a transformar los aportes de cada trabajador en beneficios para toda la familia aceitera”.
En el mismo sentido, el Secretario de Organización del SOEA, Mario Chara, destacó: “Ponemos un gran esmero en que todo salga bien para que los chicos y también los papás disfruten de esta jornada tanto como ellos. Desde el primero hasta el último delegado aceitero colabora con compromiso, y quiero agradecer profundamente la predisposición de todos. Este es un momento de alegría, de encuentro y de unión para toda la familia aceitera”.

La música y el entretenimiento también fueron protagonistas. El show en vivo comenzó con la banda Menú Infantil, que hizo bailar a chicos y grandes. Luego fue el turno del Mago Matus, que sorprendió con sus trucos e ilusiones. Finalmente, el cierre estelar estuvo a cargo de Soy Solcito, la reconocida artista infantil e hija de Piñón Fijo, que puso broche de oro a una jornada repleta de alegría.